miércoles, 18 de enero de 2012

Capitulo 10

Y que viva el orgullo. Pt.2

By Ameyalli

Esperaba que a que Bill saliera del baño de nuestra habitación. Mientras tanto me dedicaba a relajar mi cuerpo para que se enfriara y meterme a la ducha. Me acosté en el borde de la cama mientras escuchaba el sonido de la regadera. Bill siempre se tomaba una pequeña ducha todas las mañanas. A lo mucho 15 minutos.
Suspire. El desayuno seria incomodo estando Bill y yo disgustados. Escuche como el agua dejaba de caer. Cerré Lo ojos y fingí dormir, no quería hablar. Por lo menos no en ese momento. Oí la puerta abrirse. Por unos minutos escuche las pisadas de Bill, y el armario abrirse. Abrí los ojos lentamente para encontrarlo dándome la espalda, con esta descubierta. Sobra decir que ver a Bill mojado es erotismo puro para los ojos, por lo menos para los míos. Volví a cerrar mis ojos maldiciendo en mi mente. ¿Por qué teníamos que estar enojados?
Estuve minutos mas esperando a escuchar la puerta cerrarse pero no lo escuchaba. En vez de eso escuche los pasos me Bill acercándose, sentí el tacto de su mano acariciar mi cabello y su cuerpo hundirse al lado mío. Seguí con mi papel de dormida, aunque mi corazón bombeaba sangre a un ritmo desenfrenado. Volví a maldecir por estar tan enamorada de Bill que no podía controlar mis emociones. Sentí como pegaba sus labios en los míos.

-Entiende que Te Amo. – Susurro en su bonito Alemán cuando separo su rostro del mío. Se estaba poniendo de pie cuando, en un movimiento rápido abrí los ojos y lo tome del brazo y haciéndolo voltear. Sin miramientos junte nuestros labios y Bill no se rehusó.

-No, tu entiende que Te Amo. – Le dije entre besos. Su única respuesta fue estrujarme fuertemente entre sus brazos y colar una de sus manos por debajo de mi blusa.

By Jasmin

Pasaban de las 12 de la tarde y apenas desayunaríamos, adoro estar de vacaciones. Entre a la cocina y ahí estaban varias muchachas preparando el desayuno.

-Buenas tardes. – Me saludaron.

-Buenas Tardes. –Conteste. -¿Ha bajado Ameyalli?

-No aun no, pero de seguro…

-¡BUENOS DIAS! – Hablando de la Reyna de Roma. Ameyali entro radiando de efusividad por la puerta de la cocina con Bill a sus espaldas agarrados de la mano. Ese fue un cambio de humor drástico pero rápidamente dije ¨reconciliación¨ en mi mente. En la mañana mientras hacíamos ejercicio note como Ameyalli estaba con los ánimos abajo. No le hice muchas preguntas, pero supe que era por Bill.

-Se dice Buenas Tardes. – Le dije

-Oh, ¿Tan tarde es? – Vacilo Bill sin borrar esa sonrisa de su cara.

-Tengo hambre, vamos.

Salimos al Jardín y caminamos hasta la mesa. Justo después de sentarme divise a Tom dirigiéndose hasta nosotros. Casi muero de risa al ver que tenia un pañuelo. Se sentó en la mesa con nosotros de mala manera.

Seguimos desayunando y platicando. De vez en cuando Tom opinaba y parecía haber sele pasado el mal humor.

-Uhm Tom, ¿Por qué traes un pañuelo tan temprano? – cambio de tema Bill. – Tú nunca usas pañuelos tan temprano. Estuve apunto de ahogarme con el jugo de naranja, pero Tom me lanzo esos ojos afilados.

-Porque ciertas personas son algo criticonas e insultan a otra gente sin fijarse en sus propios defectos. – Contesto Tom, era una indirecta algo muy directa para mi.

-Pues la verdad no doliera tanto si ciertas personas no tuvieran tan enorme ego. – Solté.

-¡Ja! ¡Mira quien lo dice, la que no sabe besar! – Se atrevió a gritarme, mis mejillas comenzaron a arder por la rabia, solté el tenedor con el que comía fruta. Me puse de pie abruptamente de la silla y lo fulmine con la mirada.

-¡Pues alguien me puede enseñar a besar, ¿Dime quien te quita esa enorme frente! ¡¿EH?!

Tom imito mi acto y se levanto de una manera intimidante. Apretó los labios en un gesto enojado. Nos acribillamos con la mirada por unos segundos, aunque parecieron minutos. Yo tenia que alzar la mirada porque aunque fuera mas alta que Ameyalli, no era mas alta que Tom.

-Tom…-Escuche un murmuro.

-¡Escucha niña! – Golpeo la mesa con el puño y se inclino sobre la mesa acercándonos más. El sonido del golpe me sobresalto pero también me hizo reaccionar.

-¡NO! ¡Tú escúchame, y escúchame bien! No se quien diablos te crees. Ya te lo dije no soy como las zorras que te llevas a la cama. Metete de una vez en la cabeza que yo no tengo nada que ver con tu novia. Así que ni se te ocurra volver a entrar a… - Tom puso su mano detrás de mi cuello, juntando nuestros labios.

¡Eso si era el colmo!

Trate de rechazar el beso pero solo apretó mas mi cuello, profundizando el contacto. Introdujo su lengua de una manera tan… Ugh.

Lo intente apartar, el di unos cuantos puñetazos en el pecho pero a el no le importo. Siguió apretando mas mi cuello. En contra de m voluntad me incline mas hacia en otro extremo de la mensa y el borde de esta hacia presión contra mi vientre.

-¡TOM, ya basta! – Escuche como Bill le ordenado en un tono muy serio.

En un movimiento brusco de mis manos se pudo escuchar el impacto de un vaso contra la mesa, seguido de la sensación de un liquido escurriéndose por mis dedos.

-¡TOM!- Volví a escuchar a Bill.

Por fin me soltó. Tome una bocanada de aire y me incorpore. Al ver el jugo de naranja de Ame derramado y a ella con cara de incredulidad me llene de vergüenza. Y después de enojo al ver la cara de satisfacción de Tom. Los mil insultos que quería decirle se quedaron atorados en mi garganta. Tome el vaso de jugo y sin pensar se lo tire encima a Tom. Antes de ver su reacción comencé a caminar rumbo a mi habitación.

By Ameyalli.

-Tom. ¿Que fue eso? – Pregunto mi novio.

-Fue solo un beso.  

-Lo note, pero vamos Tom porque…

-¡Bill! No empieces con tus regaños.

-Es nuestra invitada…

-¡EXACTO! Es una invitada y te das cuenta de cómo ella se comporta conmigo.

-¡NO, No lo he notado! – Comenzaron a alzar la voz.

-Me provoca.

-¿Que?

-Que me dijo anoche en la cena. Que soy un poco hombre.

-¡Por Dios Tom!

Y así comenzaría otra pelea de hermanos. Ya me sabía la rutina. No iba a servir de nada todo lo que Bill le dijera porque Tom se pondría a la defensiva. Me levante de mi lugar hacía la puerta trasera de la cocina. Camine hasta la habitación de Jasmin.
Llame a la puerta.

-¿Quién es?- La escuche claramente enojada.

-¿Puedo pasar?

Tras varios segundos la puerta se abrió y ahí estaba ella, con esa expresión de coraje.

-Hola. – Me dijo sin ánimo. – Pasa. – Entre sin decir una palabra y Jasmin se dirigió al ventanal, que estaba abierto. Del borde del ventanal  tomo algo y se lo llevo a la boca.

-¿Fumas?- Le pregunte extrañada.

-A veces. – Se encogió de hombros.

-Oh, ¿Y donde conseguiste cigarros?

-Se lo pedí al Rudolph. Lo encontré en la cocina. – Asentí con la cabeza.

-¿Quieres? – Me pregunto sin despegar la mirada del ventanal

-No, gracias. – No me gusta fumar, no me gusta que mi novio lo haga, tampoco que mi mejor amiga lo haga pero yo no podía hacer nada.

-Y… ¿Sigues enojada? – Pregunte tras varios segundos

-Estoy intentando calmarme. – Contesto ella después de un momento. –Pero, ¡Aghh! – Le dio otra fumada al cigarro y después lo aventó por el ventanal. Camino frustrada y se sentó junto a mi en la cama.

-Me da coraje, siento que Tom me utiliza y me siendo como una cualquiera. – Agache la mirada, sin saber que decir.

-Bill, y yo hemos hablado con Tom. Te aseguro que no se volverá a repetir pero aun así te quería pedir una disculpa.

-No te preocupes, además no es tu culpa. Tú no debes disculparte.

-Entonces quita esa cara. – Trate de animarla. –Que te parece si mas tarde salimos algún lado.

-¿A donde?

-No se, de compras al centro comercial o al cine. Lo que tú quieras. – Ella pareció dudarlo.

-¿Aun te disfrazas?- Ensanche mi sonrisa. Si, aun lo hacia. Cuando no estaba de humor para paparazis, fotos y cosas así.

-Si.

-Esta bien.

By Jasmin.

-Buenas Tardes señorita. – Me saludo Rudolph mientras me abría la puerta del coche.

-Buenas Tardes. -  Conteste. Ameyalli entonces salió de la casa e igual saludo al chofer. Este le dio unas llaves y rodeó el coche para abrir la puerta del conductor. Ame entro, aunque si la viera otra persona lo la reconocerían. Llevaba una peluca de un castaño claro, rizado. Maquillaje que le daban efectos diferentes a sus facciones, así era mas fácil pasar desapercibidas.

Por primera iba a salir de la casa y vería un poco mas de la cuidad. Estaba emocionada. Ameyalli condujo hacia el portón negro y dimos a una larga y solitaria  avenida. La enorme casa estaba apartada, como una propiedad privada. Varios metros más allá comenzaban otras cosas.

Habíamos decidido ir al cine, y tal vez a comer.

-¿Bill sabe que te disfrazas?

-Si, una vez lo saque disfrazado del Hotel en el que nos hospedábamos.

-Que divertido. – Jamás había salido con Ame disfrazada, aunque sabia que lo hacia. 

Me recargue en el asiento observando el panorama. Era inevitable sentir envidia hacia Ame. Yo jamás había experimentado eso que ella siente junto a Bill. Eso que me da tanta curiosidad y tengo ganas de sentir yo misma.
 Hay días que me siento sola, días en los que no estoy segura de quien soy o de que quiero en la vida. Tenia la sensación de que aquí podría hacer algo de mi vida algo que me brinde satisfacción, algo que llene ese vacio que con frecuencia siento en mi pecho. Aunque no se si lo que ese vacio necesita es amor, o simplemente algo para sentirme alguien importante en la vida.

-¿Jas? – Voltee a ver a Ame quien me miraba a mi y a la carretera alternadamente.

-Perdón. – Sonreí. Este no era un momento para estar melancólica.

Capitulo cortito & aburrido :S Sorry! Comenten! Las quiero!

3 comentarios:

Guada dijo...

Me encanto !, amo tu fic ! <3

Francis92 dijo...

waoooooooooooo intenso el cap madre mia estuvo q arde este cap ..muy lindo wapaa :)

♥✿мяδ. καΰŁĭĭтz✿♥ dijo...

waaaaaaaaa! xque no has subido capiii?!!